MARIAN ROJAS-ESTAPÉ: “UNA SOCIEDAD ADICTA A LA DOPAMINA”

Desde hace años la psiquiatra Marian Rojas-Estapé viene alertando de las consecuencias de la forma de vida y de relacionarnos con el entorno que nos hemos impuesto. ¿O quizá que nos han impuesto pero en la que caemos de buena gana?

El pasado martes, 11 de febrero, en el programa de televisión El Hormiguero, donde acudía para presentar su nuevo libro, Recupera tu mente, reconquista tu vida, explicó sobre una base científica el progresivo deterioro de nuestro funcionamiento cognitivo, causado fundamentalmente por la disminución de la actividad de la corteza prefrontal del cerebro, que es la zona que hace que nos concentremos y a la vez es el centro neurálgico de la fuerza de voluntad de la persona.

"Todos tenemos los mismos síntomas", afirmó Marian Rojas Estapé. "Nos cuesta empatizar, tolerar el dolor, el aburrimiento, la concentración. Nos cuesta entender al de enfrente. Todo nos molesta. O todo es bueno o todo es malo. Sin corteza prefrontal no puedes entender al de enfrente y eso lleva a polarizar. Es importante que cada uno se pregunte qué puedo hacer para salvar mi mente, mi alma".

"Una sociedad que tiene que funcionar no puede estar despistada cada 20 segundos. Constantemente hay una alerta, un correo, un mensaje. Buscan deteriorar nuestra capacidad de atención. ¿Qué hacen las redes sociales? Manipulan la dopamina, meten distracciones y hacen que la persona tenga más distracciones para mermar nuestro sistema prefrontal del cerebro."

Son dos las sustancias que causan el proceso de deterioro cognitivo, según Rojas-Estapé: "Está por un lado la dopamina, que es una sustancia maravillosa, la sustancia de la felicidad, pero lo que hace es que las neuronas se avisen las unas a las otras de que eso les gusta y les recuerda lo que les gusta, lo que les calma y lo que les da placer y quieren repetir esa situación. Es un sistema de recompensa. El cerebro que no quiere que nos convirtamos en adictos a la dopamina va generando tolerancia y generando dolor para contrarrestar. Y nos hace consumir más para generar más y más dopamina y calmar el dolor, como una anestesia. Nos intoxicamos de dopamina", explica la psiquiatra.

"El cerebro recuerda lo que le calma, le excita y le da placer. Me calma pedir comida a domicilio, comprar compulsivamente y ahí se generan los hábitos y las adicciones". Es la base de una sociedad adicta.

 Y amplía: ¿"Quién equilibra ese exceso de dopamina? El dolor. Y hay un momento que empieza a generarse dolor, dolor, dolor y ya no consumes por placer sino para apagar el dolor. Todo me duele, todo me molesta, todo me frustra, tengo nula tolerancia a la vida. ¿Cuándo coges el móvil? Cuando estás aburrido y estresado."

"Es un generador directo de dopamina. Es llevar un dispensador automático en el bolsillo. Cuando yo dejo de practicar el aburrimiento, cada vez sé menos. Cada vez que estoy estresado o aburrido tengo una vía de escape. Las dos únicas cosas que llegan al corazón tienen que ver con el amor y el trabajo. Si yo vivo acostumbrado a la gratificación inmediata llego a estas dos cosas y no lo soporto. La dopamina intoxica a la dopamina y se convierte en un veneno."

"Primero, estamos en una sociedad que se siente sola. La segunda es la hiper estimulación, captas el mensaje y pierdes los detalles. Y tercero, distracciones constantes que te llevan a auto distraerte. La consecuencia es que el cerebro se hace adicto a lo irrelevante. Dejo de profundizar, dejo de reflexionar, de contemplar y nos polarizamos. Porque los algoritmos sólo te enseñan lo que te gusta, no te enteras lo que piensan los otros y entonces te conviertes en blanco o negro. Si algo hay que funcione es ponerse de acuerdo con quien piensa diferente a nosotros".

No obstante, hay solución: desengánchate de las redes sociales, habla con la gente cara a cara y procura entenderla, abúrrete solo, haz deporte, contempla el mundo con ojos de asombro… ¿A que no es fácil?

Si quieres hacer un comentario, recuerda iniciar sesión o registrarte en el recuadro de la esquina superior derecha de la entrada. Nos encantará leerte. Y si nos das un me gusta haciendo clic en el corazoncito, estaremos más encantados todavía.